El hierro ha estado presente en la tierra desde hace miles de años. De hecho, este material ha sido y continúa siendo uno de los metales más utilizados y trabajados a lo largo de la historia, no solo para la fabricación de piezas como armas o utensilios, por ejemplo; sino como elemento para formar otro tipo de metales, creando diferentes aleaciones de hierro.
Pero, ¿sabes qué es una aleación de hierro y cuáles son sus principales propiedades? ¡Te lo contamos todo aquí!
¿Qué es el hierro?
El hierro es el metal de transición más abundante en la corteza terrestre, y cuarto de todos los elementos. De hecho, como curiosidad diremos que es el principal metal que compone el núcleo de la Tierra, hasta con un 70 %.
Es por esto que forma parte de la tabla periódica con un número atómico 26 y destaca por ser un metal de transición maleable de color gris plateado, extremadamente denso y duro. Cuenta con propiedades magnéticas, debido a que es ferromagnético a la presión atmosférica y a la temperatura ambiente.
Su uso se origina desde hace 4.000 años a.C, en sus comienzos se utilizaba con fines ceremoniales, y para el siglo X a.C pasó a ser la materia prima en la creación de espadas. Desde ese momento su uso se volvió imprescindible para el ser humano.
Sin embargo, a pesar de ser el cuarto elemento que se encuentra más abundante en la corteza terrestre con un 5 % de sus componentes; en la naturaleza no se halla ni es usado en estado puro. Por el contrario, se combina con otros metales y minerales con el fin de formar aleaciones.
Las propiedades del hierro son las siguientes:
- Es maleable: esto quiere decir que se puede deformar sin romperse, y es por ello, que se puede elaborar en diferentes capas.
- Es duro: es un material bastante resistente y difícil de rayar.
- Resulta denso: el hierro es un material con una alta densidad, es decir, un pequeño volumen puede tener un gran peso.
¿Qué entendemos por aleaciones?
Cuando se utiliza el término “aleación” este hace referencia a la combinación o mezcla de dos o más elementos, donde al menos uno de ellos es un metal; con el fin de formar un nuevo material que disponga de las propiedades de sus componentes.
Estas son consideradas como mezclas debido a que no se producen reacciones químicas entre sus elementos, por lo tanto, no existe el enlace entre átomos.
Generalmente en las aleaciones se combinan distintos materiales metálicos, pero, también las hay en combinación de uno metálico y el otro no.
El proceso de aleación es bastante usado en las industrias siderúrgicas y de los materiales con el fin de obtener otros materiales como el bronce o el latón.
Todo tipo de aleación se encuentra formada por al menos dos componentes, siendo uno el material de base donde se agrega el/los materiales aleantes.
Existen muchos tipos de aleaciones: de acero, latón, bronce, amalgama, peltre, oro blanco, magnalio, metal de wood, metal de field, galinstan, metal de rose, nak o vitalio.
Propiedades de la aleación de hierro
Una aleación de hierro es aquella en la que el hierro es el elemento base y se sitúa entre las aleaciones más comunes, donde surgen diferentes materiales que usamos en el día a día; todo gracias a la facilidad de producción y la versatilidad del material.
El carbono es un elemento fundamental en todas las aleaciones de hierro, su función es que transforma al hierro en un material mucho más resistente a la corrosión; pero, este también lo vuelve más quebradizo, por lo que las porciones en las que se agrega son pequeñas.
Un ejemplo claro de una aleación de hierro es el acero; este es el resultado de la combinación de hierro y carbono. El acero se divide en diversos tipos según la porción usada de carbono:
- Acero de bajo carbono: se caracteriza por su baja resistencia pero alta ductilidad. Un ejemplo de este tipo de acero es el alambre.
- Acero de medio carbono: es el tipo de acero por el que está constituido las piezas de máquinas y los engranajes.
- Acero con contenido de carbono: se caracteriza por su alta resistencia pero baja ductilidad. Algunos ejemplos de este tipo de acero son los cuchillos, los taladros, los resortes y las herramientas de corte.
Para la obtención del acero, el carbono es el elemento que se presenta fundamentalmente, sin embargo, una aleación de hierro también está constituida por diversos elementos como el azufre, el oxígeno y el silicio.
Otro ejemplo de una aleación de hierro es el acero inoxidable, este se diferencia del acero común por disponer de buena resistencia a la corrosión, gracias a la adición de cromo que posee como ingrediente.
Un tercer ejemplo de una aleación de hierro es el hierro fundido, este se caracteriza por contar con altos niveles de carbono.
Las principales propiedades de las aleaciones de hierro dependen directamente de las propiedades de su material inicial y de la proporción de ellos. Por ejemplo, el acero, que es uno de los materiales obtenidos de una aleación de hierro, cuenta con propiedades como la durabilidad, la resistencia a la tracción, la resistencia a la fluencia y una excelente conductividad térmica.
