El arte de la fundición de metales es, sin duda, uno de los más apreciados de la antigüedad, pero también hoy en día. Y es que, en muchas ocasiones, no somos conscientes de la gran importancia que tiene la fundición de metales en la actualidad.
Origen de la fundición de metales
Se trata de una técnica que data de alrededor de 6000 a.C. Esta técnica se utilizó para crear objetos de metal como armas, herramientas y objetos ornamentales. Y, para llevar a cabo la fundición, se necesitaba un metal, un crisol para fundir y un molde para darle la forma deseada al objeto.
A diferencia de lo que piensan muchas personas, esta técnica tuvo su origen en la gran civilización Egipcia y en poco tiempo se extendió por todo el mundo.
Fue en la Edad Media cuando la técnica tomó mayor protagonismo. Los hebreos usaban la fundición de metales para hacer armas y herramientas. Todo ello originó una auténtica revolución en la industria del momento. Estas armas, mucho más duraderas y eficaces, permitieron una mayor potencia en el terreno militar. Y una victoria militar, entonces, supone una victoria económica.
El proceso de fundición ha tenido un gran avance desde sus orígenes. Hoy por hoy, hay una gran variedad de materiales que pueden fundirse para crear diferentes objetos de metal: desde el aluminio hasta el acero. Además, existen herramientas capaces de moldear los metales fundidos como las máquinas de inyección.
De cualquier forma, el arte, la esencia de la fundición, sigue siendo la de antaño: unir diferentes metales para buscar las propiedades buscadas y darles la forma requerida.
El proceso básico
La fundición es un proceso de metales que emplea estos elementos para unirlos y darles una forma concreta. El proceso es simple, fundir y colar el metal líquido en un molde para que, una vez frío, adquiera la forma deseada.
El moldeo suele ser de arena, que se consolida por apisonado alrededor del propio molde que se extraerá antes de recibir el metal. La gran ventaja es que este tipo de moldes no tiene límites en lo que respecta a volumen: es capaz de modelar desde una pieza de milímetros hasta una pieza de varias toneladas.
El hecho de fundir un metal depende de varios factores: su composición, su temperatura de fusión y la tensión. Estos factores serán los que finalmente determinen su fluidez y consistencia.
En cuanto a tipos de fundición, la fundición en lingotes, colada o en moldes, siguen siendo las más comunes. Sin embargo, podemos encontrar muchas otras como:
- Fundición gris laminar.
- Fundición gris con grafito tipo A y tipo D.
- Fundición blanca hipoeutéctica.
- Fundición maleable de corazón negro.
- Fundición dúctil.
- …
Usos y aplicaciones en la era moderna
La técnica de fundición, hoy en día, sigue siendo imprescindible en muchos sectores y áreas de desarrollo humano. Se trata de una técnica ampliamente usada, por ejemplo, para la fabricación automovilística como los motores o la propia estructura del vehículo.
La posibilidad de combinar diversos metales para adquirir una determinada propiedad, da el privilegio de poder utilizarse para diferentes áreas. Por eso no solo se enmarca dentro del área del automóvil, también podemos encontrar procesos de fundiciones para la construcción de edificios, pequeñas piezas de electrónica y/o electricidad e incluso, la fundición que hace que una obra de arte en la plaza central de una ciudad, cobre el protagonismo que merece.
Un arte que lleva milenios entre nosotros y que con el tiempo, aunque manteniendo su esencia primigenia, se ha ido modernizando y actualizando a la era moderna. Un arte que sigue más presente que nunca y con el que podrás hacer realidad tus proyectos.
En Aleaciones y Fundidos llevamos décadas poniendo el arte de la fundición al alcance de cualquiera. Si tiene dudas o necesitas más información, consulta con nuestros expertos.